El milagro económico español

Con este nombre conocemos a la etapa de desarrollo económico durante el franquismo. Este `milagro económico` comienza a partir del 1959 con el Plan Nacional de Estabilización Económica, un conjunto de medidas aprobadas por el gobierno franquista cuyo objetivo era la estabilización y liberación de la económica española.

Situación económica previa:

A partir de la Guerra Civil, la economía española comenzó un periodo de autarquía, que se basaba principalmente en el aislamiento en España en relación con el mercado internacional y en el autoabastecimiento.

Esta política autárquica fue un completo fracaso ya que prolongó y agudizó la escasez que gran parte del país había sufrido en la guerra, provocó el estancamiento del mercado y frenó la modernización.

A mediados de los 50 era evidente que el modelo autárquico de desarrollo de la economía española estaba agotado. De hecho, en el 59, España, junto a Portugal era el país más pobre de Europa.

El Plan Nacional de Estabilización Económica:

Tras unas medidas tomadas en el 57 que antecedían este giro en la economía española, este, elaborado con la colaboración de economistas como Juan Sardá y Enrique Fuentes Quintana, fue aprobado el 21 de julio de 1959.

Establece una serie de objetivos a conseguir: estabilidad económica, robustecimiento de la moneda, de modo que se convierta en una divisa estable y equilibrio de la balanza de pagos.

El plan preveía actuaciones como:

·         Fijación de un cambio estable de la peseta con las otras divisas.

·         Reducción del intervencionismo del Estado en la economía.

·         Liberación de las importaciones y fomento de las exportaciones.

·         Reducción del gasto público y congelación del sueldo de los funcionarios, moderación salarial para luchar contra la inflación.

·         Fomento de la inversión extranjera.

Este proyecto permitió, tras una breve recesión de dos años, un crecimiento espectacular de la economía española. Entre 1960 y 1973 la economía española registró un nivel de crecimiento que sólo fue superado por Japón.  

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El éxito del Plan de Estabilización de 1959 dio lugar al llamado desarrollismo, etapa dominada por los tecnócratas del Opus-Dei en la que se llevaron a cabo numerosos planes de desarrollo, dando lugar incluso a la creación de un Ministerio de Planificación y Desarrollo. Además, todo esto estuvo impulsado por un crecimiento económico mundial.

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Los resultados del desarrollismo económico de esos años dieron lugar a una industrialización acelerada, la estimulación del crecimiento demográfico, un aumento masivo del turismo, el desencadenamiento de movimientos migratorios interiores, éxodo rural; y exteriores, produciéndose desequilibrios demográficos y cambios en la estructura social; y finalmente a la apertura al mundo de España. 

La crisis internacional del petróleo de la década de 1970 supuso el final de este periodo de auge y crecimiento económico. A partir de entonces , la economía siguió una trayectoria ascendente más leve. 

María Otero Romero